jueves, 29 de septiembre de 2011

El árbol de la vida




Pregúntense qué películas sabe seguro que va a recordar dentro de 20 años, o el resto de su vida. Cuales de las 100, 150 o 200 que ve al año tiene la certeza de que se quedarán grabadas en su retina, o en un primer plano de la memoria donde no tenga que hacer esfuerzo para recordarla. Pregúntese cuantas películas remueven algo en su interior, cuantas tienen el poder de hacerle pensar días o cuantas la capacidad de, literalmente, abrirle la boca ante lo que esta viendo. Pregúntese cuantas películas han sido capaces de hipnotizarlo o cuantas de las que ha visto está narrada de una forma que en nada se parece a lo que ha visto anteriormente.

Añadan una más a la lista. Quizás el párrafo anterior lo demuestra, pero no sé como hacer una crítica del árbol de la vida sin ponerme pedante. El hecho es que hacer una reseña de esta película es inabordable, al menos para mí, por su profundidad y contenido. Así que trataré de resumir, ser conciso y no irme por las ramas, aunque la película se presta a ello..


¿De que va? De la vida, de la muerte, de la creación, del ser humano, de nuestro papel en el universo y nuestra relación con dios. Creo. Hombre, dicho así suena peor de lo que es. Y no creo que sean temas que uno no se haya planteado nunca (excluyendo a generaciones posteriores a las del 84). El punto de partida (o el final) es la muerte de uno de los hijos de una familia clásica de la america de los 50. Una familia buena, que da dinero a la iglesia, cuyo padre no falta al trabajo, creyente y que no ha hecho mal a nadie nunca, entonces, la pregunta es ¿porque tiene que morir? ¿porqué dios deja que muera un inocente? o en términos más generales ¿porqué tiene que haber sufrimiento en este mundo?


No esperéis respuestas, porque no las hay. Y mucho menos en la película. Supongo que cada uno que piense en ella sacará una interpretación diferente de 'el árbol de la vida', y como yo tengo un blog, voy a poner la mía. Entiendo que no hay que intentar traducir cada metáfora, cada escena y cada símbolo (por aquello de no volverse loco), pero ver esta película y no reflexionar sobre ella es una auténtica tontería. Yo creo que una posible interpretación de la película es...


Quién más y quien menos sabe que esta película tiene aproximadamente 40 minutos (hay quien considera que infumables) con imagenes de la creación del universo, la creación y evolución de la vida hasta llegar a nosotros mientras una voz en off se pregunta algunas cosas..



Para mí, ni es estos 40 minutos ni la cada vez más famosa escena del dinosaurio son baladí, porque tal y como yo lo veo aquí se expone que el universo, la naturaleza, los seres vivos.. todo son una misma cosa (por convenio, llamémosle dios). Algo inmensamente bello, inmensamente grande y con una profunda interrelación entre los elementos que componen el todo.. Desde luego viendo la perfección, belleza y complejidad de esas imágenes uno cree tener más claro y cercano el concepto de divinidad y trasciende un poco de la cascara de nuez donde está inmersa su vida y su día a día. Se aleja un poco del ruido. Bien, para eso creo que sirve la escena de los 40 minutos, para exponer la visión del director acerca de la existencia y naturaleza de dios (si me pusiera pijo, diría que es para mostrarnos su visión panteísta, pero no lo voy a hacer..)


La escena del dinosaurio donde el bicho siente piedad por el débil y le persona la vida, entiendo que es para decir que este no es un sentimiento únicamente humano.. lo que si es típicamente humano es, y ya enlazamos con la subrama más mundana de la película, es el egoísmo, la ambición, la crueldad.. conceptos que encarna el personaje de Bratt Pitt, un hombre un tanto patético, amargado, cuya ambición puede más que su talento.


En contraposición con la madre de la familia, el personaje del padre representa como el ser humano se aleja de la naturaleza, la belleza, el equilibrio perfecto entre que existe en todo el cosmos ¿explicación al tema del sufrimiento? No sé, para ser justos, una cosa que hay que decir de esta película, es que te deja con bastantes más preguntas que respuestas.


Es un viaje de ida y vuelta, porque al igual que se ve el alejamiento de los personajes (padre e hijos influenciados por su padre) del camino y la forma de vida mas armónica, el personaje de Sean Penn realiza el trayecto inverso durante todo el metraje hasta llegar a un final con, a mi juicio, demasiados simbolismos pero que de una vez por todas me ha hecho comprender esa palabreja tan en boga entre los críticos de cine: redención.


Vaya tostón he soltao. Pasemos a cosas más ligeritas..



Desde un punto de vista más estético o formal.. las dos únicas palabras que quiero decir sobre la película (creo que esto está quedando un poco largo..) son impresionante y original. Impresionante porque las imágenes, y cada plano son ¿cual es el hiperlativo de bonito? pues eso. La combinación música-imágenes es perfecta, una de esas películas que consigue provocarte el sindrome de stendhal, aunque no lo tengas. En muchas escenas la cámara parece flotar persiguiendo a los personajes, otros planos parecen fotografías en las que únicamente se mueve una parte pequeña de la imagen.. Malick rompe moldes también en este sentido y el resultado global da sensación de perfección y cuidado, como si se hubiera llevado 25 años en la sala de montaje, escogiendo al milímetro qué, como y cuando se ve cada fotograma.


En resumen, una película para reflexionar, filosófica, profunda, que no trata al espectador como si fuera un imbécil, tremendamente bella y tremendamente cuidada. Te hace comprender porque este formato alcanzó la categoría de arte. No todo brilla, la película más que cansa, agota a quien la está viendo, es demasiado abstracta en algunos momentos, puede ser que sea un poco larga y, como dije antes, si no entras en su juego o entras en la sala queriendo ver cine convencional, vas a salir muy defraudado. Resumo:


No es para todo el mundo.

No es para cualquier momento.

Única.

Irrepetible.

martes, 26 de octubre de 2010

Largo Domingo de Noviazgo

No hay demasiado que contar sobre este drama/historia de
misterio/película romántica inspirada a finales de la primera guerra
mundial. Hacía infinito tiempo que tenía infinitas ganas de ver esta
película, no en vano su director es autor de, para mí, una de las 10
películas que todos deberíamos ver antes de morir: Amelie.

Manech es un chico delgaducho al que también le gusta dormir con la teta de su amada en la mano (oups). Un buen día, como a tantos franceses en la época, le hacen de ir a la primera guerra en contra de su voluntad, y dejar en el pueblo a su amor, la cada día más hipnótica Audrey Tautou (Mathilde). Mathilde, que recibe noticias de que su chico ha sido ejecutado por automutilación para escaquearse, no se cree o no se quiere creer tan triste noticia empieza a mover cielo y tierra buscando a Manech y la verdad de lo que ocurrió..

¿No pasa que una película parece que lo tiene todo pero algo no os termina de encajar? Para empezar, como historia de intriga es una película bastante conseguida: te van desvelando una trama compleja poco a poco, con sus flashbacks aclaratorios, sus giros de guión en el momento oportuno, personajes oscuros, que mienten y misteriosos (Marion Cotillard de Serial Killer incluida). Pero bueno, Largo Domingo de Nov.. también es una historia de amor, sobre todo. Al fin y al cabo es la motivación del personaje y lo que mueve la historia. Lo único que importa al final..

Y de paso, pues la película hace un recorrido por todos los horrores de una guerra y sus sinsentidos: reclutas obligados a ir, automutilaciones para escaparse, franceses matando franceses, hambre, frio y además Mathilde, se pasea, como el que no quiere la cosa, por
un país medio sumido en la depresión, que no sabe hablar de otra cosa, por las cicatrices que no solo quedan en el campo de batalla, sino en las viudad, los amigos, los hijos y la economía y el orgullo de un país.

Sumémosle a esto que está francamente bien dirigida. Me ha llamado la atención que existan dos tipos de fotografía en la misma película: una para las escenas de ella, donde no había visto nunca un amarillo tan cálido y un ambiente tan agradable en pantalla. Todo se torna gris (supongo que será algún tipo de filtro) cuando aparecen las escenas de guerra, sucio y mucho más frio. Supongo que es un mérito de Jean-Pierre Jeunet trasladar sensaciones al otro lado de la pantalla únicamente con el uso de los colores en las escenas. Además, todo está muy 'Amelizado', tanto en la caracterización del personaje principal como en las pequeñas tonterías, detalles y niñerías que te sacaban la sonrisa en aquella película.

Y bueno, sumémosle de nuevo a todo la anterior que el doblaje del narrador corre a cargo de Leonor Watling...

Pero no, no me termina de convencer, me esperaba mucho más. No es especial, se parece demasiado a la película anterior de este director, incluso en el reparto.. la trama de investigación es un tanto difícil de seguir y el final es más que evidente.. luego hay personajes destinados a hacer gracia y no la hacen, subhistorias cogidas un poco con pinzas (la mencionada de la asesina Marion Cotillard), la historia de amor no emociona y si queremos una película para ver el transcurso y consecuencias de la guerra, hay muchas mejores. Le falta algo, no sé el qué, supongo que combinar la dulzura de Amelie con la cruda guerra es algo que no encaja. Quien mucho abarca...

domingo, 24 de octubre de 2010

The Chaser

Chugyeogja es el título original de este thriller coreano, que todavía no me explico porqué tiene tan buenas críticas. Sin estar nada mal, ni te va a cambiar la vida, ni va a revolucionar el género ni va a ir mucho más alla de tenerte entretenido las 2 horas que dura. Se me escapa porque hay gente que la alaba tanto por ahí pero entiendo que está relacionado con ese extraño fenómeno que relaciona de forma inversamente proporcional la buena acogida de la crítica y la calidad de la distribución de una cinta.


La sipnosis. Voy a omitir nombres porque realmente tampoco van a aportar mucho. Chino1 es un antiguo detective reconvertido a proxeneta, siempre está de mala leche pero últimamente con más razón porque le están desapareciendo trabajadoras. Un buen día, se da cuenta de que las últimas citas de sus prostitutas desaparecidas han sido con el mismo número de teléfono, por lo que piensa que quizás alguien se las esté llevando a la competencia y empieza a investigar. Nada más lejos de la realidad, lo que pasa es que se las está cargando Chino2, un jovencito impotente y aún con más mala leche que Chino1. Toda la película transcurre, cual 24, en tiempo real y la acción se desencadena a raiz de que Chino1 envié a Puta1 a ver a Chino2 y Puta1 desaparece..

Muchos claroscuros (como mola hacer críticas e inventarte palabras) en la opera prima de Na Hong-jin (como mola hacer críticas y hablar de directores como si los conocieras). En el lado positivo, si no por la historia, la película destina originalidad en el sentido de que no es el típico Thriller donde se investigan las dos horas el asesinato y al malo lo cogen solo al final. No, aquí a la media hora de película (la mejor parte, cuando presentan a los personajes y la historia) ya está el asesino atrapado, por tanto, la hora y media restante es poco común, yendo más alla y sacándole más partido a la historia. 

También destacaría el ambiente conseguido, donde todos están absolutamente al borde del ataque de nervios, cosa que también la hace diferenciarse un poco del típico thriller con el policía reflexivo y el malo que lo controla todo. Inquietante, con unos personajes que no son abiertamente ni buenos ni malos y unas interpretaciones a gran nivel.

Pero no todo es de color de rosa en The Chaser, de hecho, es todo bastante de color rojo, cosa que no me ha gustado. Demasiada sangre y escenas al borde del gore que no se muy bien que aportan exactamente a una historia que no necesita parecerse a Saw para sostenerse. Además, hay un par de detalles cogidos con pinzas que le restan credibilidad a la película: el primer encuentro entre Chino1 y Chino2  y el último entre Chino2 y Puta1 son absolutamente forzados, no sé, un guión que tiene que recurrir a dos casualidades tan grandes para seguir con la historia..

En fin, original, inquietante y a ratos divertida es una gran opción para pasar un buen rato y ver algo diferente, pero repito que creo que es una equivocación esperarse gran cosa de ella y mucho menos considerarla una obra maestra. Le sobra sangre, quizás algo de metraje y tampoco es una película que de pie a ningún tipo de reflexión.

martes, 19 de octubre de 2010

The cove


Flipper. Mi amigo Flipper se llamaba la serie, o algo así. ¿sabéis qué? que Flipper se suicidó. Como para todo cetáceo, y a diferencia de los humanos, para Flipper tomar aire era un acto consciente , y ella un buen día decidió dejar de respirar, y morirse. Porqué estaba agobiada, estresada y triste.

O al menos esto es lo que defiende esta película, The Cove, ganadora del oscar al mejor documental en 2010. Como todo buen documental que se estila últimamente, el objetivo claro de The Cove es formar una opinión al espectador, y en este caso, se quiere quitar la venda de los ojos al despreocupado ciudadano en dos cosas: 1) la industria billonaria del ocio que generan los delfines y sobre todo 2) lo que sucede en una pequeña cala de Taiji, Wakayama (Japón). Un sitio vetado para las cámaras, activistas y toda persona ajena al circulo muy cerrado de pescadores japoneses donde se matan a base de clavarles un palo afilado en el lomo a unos 23.000 delfines anuales.

Bien, si hubiera que definir en una palabra la película sería sobrecogedora. Te van soltando poco a poco pequeños detalles de cuan cabrones son los japones y tal, y la película va creciendo en cuanto a intensidad hasta llegar al punto álgido, precisamente al final, donde se muestran una serie de escenas que se quedan grabadas a fuego en la retina, y con la impresión de que por mucho mucho tiempo. Creo que todo el mundo sabe de qué imágenes hablo porque de hecho han dado la vuelta al mundo, chapó por el equipo del documental que ha sabido destaparlas.

Pero independientemente del efectivo resultado final, hay que reconocer que el documental está muy bien planteado y montado como película. Al más puro estilo 'Ocean 13's' van formando un equipo y superando pruebas cada vez más difíciles: trasladar el material de filmación a japón, colarse en la cala, disimular cámaras en piedras, meter un hidrófono sorteando la seguridad.. En fin, que aparte de las charlas, entrevistas y datos típicos del género hay un componente de 'acción' por así decirlo que le da un aire bastante fresco a un género bastante propenso a hacer que me quede dormido.

Y hablando de las charlas, entrevistas y datos.. se dicen muchas cosas interesantes. Para empezar que la carne de los 23K delfines que se cazan ilegalmente en Taiji se distribuye como carne de ballena, y que los niveles de mercurio y contaminación de están a la altura de las uñas de McGuiver. 

¿Porqué se hace esto entonces? Pues eso me ha parecido francamente lo más interesante de la película, ellos defienden que por encima de los motivos económicos están los sociales, y que lo consideran una forma de rebeldía hacia un occidente que les ha impregnado hasta los huesos y siempre le dice lo que tiene que hacer. No sé.. 

¿Y como se hace eso? Interesante también, existe una comisión a nivel mundial que regula la caza de cetáceos y Japón, por lo visto, se encarga de untar con manteca a países que ni les va ni les viene el asunto (algunos africanos y otros caribeños). Es curioso ver un centro pesquero abandonado en Antigua financiado por Japón y actualmente usado para almacenar pollo..

Y bueno, de forma constante en toda la película se habla del negocio de los delfines en las atracciones de todo el mundo, como tienen que mezclar su comida con medicamentos anti-estrés para que puedan soportar el confinamiento y el ruido de su hiper-sensible oido. Creo que se mete en terrenos un poco más resbaladizos, cuando habla sobre la consciencia de sí mismos que tienen estos animales y su capacidad de comunicación con los seres humanos..

Resumiendo, una película excepcional, que combina una labor de investigación impresionante con buenas reflexiones sobre el maltrato animal y que para colmo se narra con suspense, acción y de una forma muy dinámica. ¿El problema? Si le tuviera que poner alguno, es que yo ya no me creo nada. De nadie. Sin tener ningún argumento para rebatir nada de lo que dice te da la impresión de que están siendo bastante maniqueos y un pelin sensacionalista a veces. Uno sale con la certeza de que los japoneses son más cabrones de lo que parecen y con una duda ¿Y qué diferencia hay en lo que hacemos con los delfines y el resto de los animales? Nuestra compasión no puede depender únicamente de la inteligencia del animal que acuchillemos.. ¿no?

En cualquier caso, y como dice el narrador, si no somos capaces de resolver esto ¿como vamos a resolver nada más importante?

domingo, 17 de octubre de 2010

La Red Social

En mi doble condición de informático y cinéfilo empedernido, ver una película dirigida por el director de Seven o El club de la lucha, que cuenta la historia de un informaticucho que de la nada crea una empresa valorada en 25K millones de dólares es poco menos que una obligación moral. Reconozcamoslo, en los últimos 50 años la informática ha cambiado radicalmente el mundo tal y como lo conocíamos (y no sé que pensar: si a mejor o peor) y en los libros de historia de dentro de 150 años aparecerán nombres como Berners-Lee, Gates, Jobs y, porque no, Mark Zuckerberg.

Mark Zuckerberg es el creador de Facebok. Sí, esa página que utilizamos para cotillear fotos de las amigas de las amigas de nuestros amigos o apuntarnos a grupos como 'Yo también creo que Rouco Varela y Paco Clavel son la misma persona'. Más alla de la pamplina en la que se está convirtiendo el invento, no hay que negar que ha supuesto cierta revolución en la forma de interrelacionarnos que tenemos las personas, y esto no es poco. Pues bien, esta película cuenta los orígenes del invento, desde un primer germen (facematch) creado por Zuckerberg en una noche a raiz de un palo sentimental, hasta convertirse en una página con 500 millones de usuarios. En el camino, plagios, demandas, puñadas, juicios, tensiones y traiciones.

Vaya por delante que al usuario medio de facebook NO le va a gustar esta película. Es una película tremendamente seria, compleja y por momentos, al más puro estilo Syriana, muy difícil de seguir. Junto a la historia (es muy curioso que se haya hecho una biografía de un chaval que creo que tiene 26 años), el punto fuerte de esta película es la definición de unos personajes, ninguno abiertamente bueno ni malo, y todos con sus contradicciones. Esta buena dosis de complejidad y profundidad en los personajes es lo que más me ha llamado la atención, pero no quiero dejar atrás la profundidad de una historia que quiero entender que va más alla de la creación de una página web y de como un chavalin se hace multimillonario, sino que pone encima de la mesa temas mucho más serios como el valor de la amistad (valor en el sentido de precio), el mundo (representado aqui como el ambiente universitario de Hardvard, pero claramente extrapolable al mundo empresarial en general) donde no solo vale con ser el mejor, sino que hay que llegar el primero, donde no te puedes fiar de nadie y hasta el más tonto te mea en la oreja. 

No hay escenas de acción, no las hay, y muchas menos escenas de universitarias borrachas de las que indicaba el trailer. Es una película en el que buena parte del metraje se basa en programación en php y en reuniones pre-juicios, dos cosas que a buen seguro están el top-5 de actividades más aburridas de cualquier persona sensata. Sin embargo, las dos horas que dura son trepidantes, y creo que a eso ayuda de forma decisiva la magistral dirección de Fincher. Con un ritmo que sabe mantener la atención del espectador, sabiendo crear perfectamente momentos de éxtasis y acertando al repartir estas por el metraje. Un acierto también que apuntarle al director, junto a la dirección de los actores, el haber fraccionado la historia para contarnos sus tres ramas en paralelo, y con numerosos saltos atrás y adelante en el tiempo, quizás al principio te descoloca un poco pero me da la impresión de que si se hubiera contado linealmente la película hubiera perdido bastante. A nivel ya puramente formal, la innecesaria competición de remo es una de las escenas más estéticas que recuerdo haber visto últimamente.

Un guión inteligente para retratar a unos personajes inteligentes. Los diálogos definen perfectamente a los personajes y concretamente destacaría el de Zuckerberg, muy complejo y ambiguo, de esos que te hacen charlar un buen rato cuando sales del cine, de hecho, el guión y el director juegan con mucha sutileza con este personaje, y uno termina de verla y no sabe si es un cabrón traidor, o un chico retraído y despreocupado, si realmente le importa el dinero, la fama, o la amistad. Porque eso es otra, esta película puede ser un buen punto de partida para reflexionar sobre la amistad y hasta que punto es un sentimiento incorrompible por el dinero (la relación de Zuckerberg con su director financiero Eduardo Saverin) o cuanto hay de verdadero en una amistad surgida entre el oportunista Sean Parker (co-creador de Napter, interpretado por Justin Timberlake) y el protagonista.
Esta película no hubiera alcanzado los niveles de calidad que ha alcanzado sin las brillantes interpretaciones con las que cuentan. Sin ser actores super famosos, no hay ninguno que no se salga. Jesse Eisenberg está creíble desde el primer momento, y en su interpretación se puede ver toda la complejidad del personaje, y por momentos la anguistia que le tiene que suponer a un chico de 20 años estar creando un producto que va a revolucionar el mundo. Pero sin duda, la sorpresa de la película es Justin Timberlake, en un personaje que, por otro lado, es una joyita para interpretar, sencillamente, lo borda. Consigue trasmitir el optimismo y fuerza de su personaje al otro lado de la pantalla, pero deja entrever muy sutilmente un lado oscuro, creando un secundario que a buen seguro será recordado mucho tiempo. El rey del pop apunta maneras para esto, sí.

Oye, no estamos hablando de la película del siglo, no lo creo. Junto a la sensación de que el buen sabor de boca que tengo lo va a diluir el tiempo, creo que 'La red Social' tiene algunos peros. Para empezar ,quizás por momentos sea demasiado compleja / liosa, quizás en un intento por acercarnos a las mentes de los personajes protagonistas, que funcionan más rápidas que la del resto de mortales, algunos diálogos son demasiado atropellados, sin tiempo de digerirlos y, en cualquier caso, conforme van pasando los minutos se crea cierta fatiga (o quizás la fatiga me lo provoco el saco de palomitas que me tomé, no sé). Esa complejidad mantenida durante tanto tiempo en la cinta hace que se haga un pelín, pelín larga. En ese sentido recuerda un poco a Zodiac, también de este director. 

Otro pequeñísimo problema es que la historia va de más a menos, y eso no es culpa del director sino del transcurrir de los hechos, es mucho más interesante (o al menos se cuenta de forma más interesante en la película) los inicios y creación del producto a la época de las puñaladas traperas.. mi opinión es que todas las películas realmente redondas van de menos a más, y no es el caso. 

En fín, que contradiciendo totalmente lo que me esperaba de ella, llego a la conclusión de que La Red Social es una película brillante, compleja, turbía, que no solo cuenta un historia empresarial curiosa, ni el proceso de creación de uno de los inventos que quizás haya cambiado nuestra forma de relacionarnos para siempre, que no solo retrata el mundo en los campus más elititas de norte america y el mundo de tiburones de las empresas .com, no, quizás el mayor interés de esta película de David Fincher sea la magistral forma de trasladar a una historia moderna sentimientos básicos como el ego, la traición, la ambición o la codicia. ¿Oscars? Es muy pronto para hablar de ello, pero me da en la nariz que después de que la academia regalase tantas nominaciones a la no tan, tan buena Benjamin Button, Fincher se va a ir de vacío esta vez. Pero, apunten estos nombres: Jesse Eisenberg y, ojo, Justin Timberlake. He dicho.

sábado, 16 de octubre de 2010

LadyKillers


Remake del espectacular clásico 'El quinteto de la muerte' (no creáis que lo he visto, es que todo el mundo lo dice en Internet...) dirigido por los hermanos Coen, un monstruo bicéfalo que poseen la extrañísima habilidad (solo se me viene a la cabeza Allen) de dirigir igualmente bien tanto comedias como películas serias.

Ladykillers está ambientada 2000 años después de Jesucristo, 30 después de Luther King, en la época de Michael Jordan. En Nueva Orleans supongo porque la mayor parte de la población es pobre y negra. Allí vive una abuelita viuda, bonachona y religiosa, con su gato Piñones (me apunto el nombre para cuando tenga uno). Un día, interrumpe un supuesto profesor de universidad, a mi juicio mal interpretado por Tom Hanks, para alquilarle una habitación de su casa. Comprenderéis que la película sería tremendamente aburrida si no hubiera gato encerrado ¿no? Resulta que lo que pretende el profesor es asaltar un casino cavando un túnel desde casa de la abuelita, y para ello contrata a un disparatado grupo de ladrones..

Lo dicho, como se demostró con 'Quemar después de leer' o, sobre todo, con El Gran (gran, gran, gran..) Lewosky, Ethan Coen y su apéndice en forma de hermano enchufado están más que capacitados para hacer comedia: saben manejar como pocos el humor negro, dar el toque justo de absurdo y sobre todo enredar, enredar y volver a enredar la historia hasta hacerte reir simplemente por el agobio que tienen encima los protagonistas. 

También a favor un guión con frases tremendamente ingeniosas, que además hace que el ritmo no decaiga ni un segundo y sobre todo, pone en pantalla a unos personajes bien distintos, cada uno con sus neuras y 5 minutos de fama en la película para sacarte la carcajada.

Ok, es un remake y no pasará a la historia del cine, pero no es mala opción quien quiera pasar una hora y media entretenido y reirse un poco.

domingo, 3 de octubre de 2010

Luna caliente

Para dilapidar el escaso o nulo seguimiento que seguramente tiene este blog, hoy voy a comentar, muy brevemente, la última película de Vicente Aranda: Luna caliente.  Sé que las cosas están cambiando, que es un cliché, una frase hecha, etc etc, que el cine español es variado y mola muchísimo, pero en esta película:

- aparece un poeta exiliado
- se desarrolla en el franquismo
- hay mucho sexo innecesario...


vamos, que tiene buena parte de los elementos de esa formula mágica que parece que hace que el ICO abra la caja. En fin.. la historia: Eduard Fernández es un poeta exiliado que trabaja en Paris, en la UNESCO. Un fin de semana, toma vacaciones y baja a Burgos y todo empieza a salir mal. Para empezar, va a cenar a casa de un opositor del régimen y conoce a Ramona (voluptosa Thaïs Blume). Ramona, que hace honor a la canción, se le insinua a Eduard, a este se le va un poco la pinza, y la viola. Sumemos a esto que el padre de Ramona se emborracha, se lo lleva de putas, y las cosas se complican un poco.. hasta que le acaba matando. Sumemos a esto tambien que durante ese fin de semana, se estaba celebrando el proceso de Burgos, por el que se juzgaba de asesinato a la incipiente banda terrorista ETA, así que el ambiente y los grises en la ciudad estaban más que caldeados...

Quien haya leido con detenimiento el párrafo de arriba, podrá ver que el argumento carece del menor sentido. La película es una mezcla de géneros que, desde mi punto de vista, no funciona bien. Por un lado thriller, porque en esencia se trata de la investigación de un asesinato, también hay algo de histórico y el relato de una relación visceral y enfermiza entre el protagonista y la chica. No sé, quizás el fallo este en un guión poco creíble que hace imposible la labor de los actores. La inclusión de citas que paran la película y que no tienen en principio mucho que ver con la historia, no solo corta el ritmo y te ayude a desconectar, es que le da un aire de pedantería un tanto insoportable.

A la película le sobra metraje, sin duda. Es más, pienso que podría haber sido un buen capítulo de 40 minutos de alguna serie o algo así. Pero concretamente las escenas de sexo y policiacas, me han resultado especialmente inverosímiles. En fin, añadan a esto que el gran Eduard Fernandez no está creíble en lo más minimo y obtendrán una película de la que hay muy poco que rescatar, quizás solo lo curioso que resulta comprobar el apoyo que tenía ETA ente los intelectuales de la época.

Solo para fans de Vicente Aranda... para los 3.

y el cartel es repreciozo.